La gigante tecnológica ya ha anunciado que recurrirá la multa y ha reiterado su compromiso por ofrecer un servicio privado y seguro.
Irlanda impuso una sanción de 225 millones de euros a la aplicación de mensajería instantánea WhatsApp por ocultar qué datos de los usuarios europeos comparte con Facebook, su propietaria. Según las leyes comunitarias de protección de datos, esto supone una violación de la privacidad.
El Comisionado de Privacidad de Datos (DPC) de Irlanda ha establecido que, en 2018, WhatsApp falló al no proporcionar la información suficiente para que sus usuarios pudiesen conocer de forma transparente como sus datos eran usados y compartidos con Facebook para propósitos publicitarios. También se culpa a la compañía por no cumplir con sus “obligaciones de transparencia” y se la insta a adoptar «una serie de medidas correctivas específicas«.
Los investigadores establecieron una multa máxima de 50 millones de euros. Sin embargo, 8 de 40 reguladores europeos se mostraron contrarios. La decisión se transfirió al Comité Europeo de Protección de Datos, que ha instruido a la DCP a aumentar la multa hasta los 225 millones de euros.
WhatsApp ha afirmado que recurrirá la multa a instancias superiores, al no estar de acuerdo con esta decisión. Además, ha vuelto a asegurar su compromiso por ofrecer un servicio privado y seguro.
En respuesta a la investigación inicial de la DCP, WhatsApp implementó cambios en sus términos de uso, en un intento de que fuesen más sencillos de comprender para los usuarios. No obstante, no ha bastado para que la DCP y el Comité Europeo los consideren suficiente transparentes para los usuarios.
En el punto de mira
A principios de este mismo año, WhatsApp anunció cambios de políticas con el que pasaría a compartir los datos de sus usuarios con Facebook. Esto causó preocupación por la privacidad de los usuarios e indignación porque Mark Zuckerberg prometió que nunca lo haría al comprar la aplicación de mensajería móvil en 2014.